Crece la preocupación entre los vecinos de Nueva Ciudad, en Torrelavega, después de que en las últimas 72 horas la policía haya detenido en dos ocasiones al individuo que hace un año atemorizó a todo el barrio. El hombre, de 42 años y vecino de Cartes, fue arrestado en 2019 tras varios episodios violentos en Nueva Ciudad, cuyos vecinos y comerciantes llegaron a movilizarse. Fue entonces cuando ingresó en prisión. Cumplida la condena, la semana pasada quedó en libertad y su primera visita fue, precisamente, a Nueva Ciudad donde vive su madre.
A pesar de tener una orden de alejamiento que le prohíbe entrar en Torrelavega durante dos años, el individuo no solo ha vuelto a su barrio sino que de nuevo ha provocado incidentes violentos. Lo hizo el pasado sábado en un negocio de hostelería del barrio, por lo que fue detenido y pasó a disposición judicial. Pero el juez, tras tomarle declaración, decretó su puesta en libertad.
De nuevo la madrugada de ayer martes fue detenido otra vez, en este caso como presunto autor de un delito de amenazas de muerte a su hermana y por quebrantar la orden de alejamiento que tiene hacia su familiar y la prohibición de entrada en Torrelavega durante dos años. Pero, por segunda vez consecutiva, ha vuelto a quedar en libertad.
Una situación difícilmente entendible para los vecinos, y también para el Ayuntamiento que ha reforzado la vigilancia en la zona para detenerle en cuanto haga acto de presencia en Torrelavega. "Cuando deja de tomar la medicación que le han prescrito se vuelve especialmente violento, y lo que está claro es que es una persona que no puede estar en la calle en las condiciones en las que está. No entendemos cómo es posible que no se le pueda recluir en algún centro", reconoce el concejal de Policia y Seguridad de Torrelavega, Pedro Pérez Noriega.
"El juez tiene que cumplir la ley que le obliga a ponerle en libertad, salvo que cometa un delito más grave que sería lo triste", y en esta situación "lógicamente el barrio tiene miedo", añade el concejal. El Ayuntamiento ha dispuesto a la Policía para que refuerce su presencia en Nueva Ciudad y para que controle los accesos a Torrelavega, para detenerle en cuanto pise el municipio ya que tiene orden de alejamiento hasta 2021.