Torrelavega registra cifras positivas en el padrón local por primera vez desde la pandemia del Covid-19. En concreto son 51.361 torrelaveguenses los que refleja el padrón este año, 219 más que el año pasado.
Se trata de una noticia muy positiva para la ciudad puesto que, con la tendencia en descenso, el riesgo de que la cifra de empadronados descendiese de los 50.000 habitantes era más real que nunca, con la consiguiente pérdida de servicios como el derecho a tener una comisaría de Policía propia o la reducción de concejalías en la Corporación Municipal.
El último ascenso de población que reflejó el Instituto Cántabro de Estadística (Icane) data de 2019 a 2020, antes de la pandemia del Covid, con una subida de 103 censados.
Lejos quedan las cifras de 1996, por ejemplo, cuando Torrelavega registraba 58.196 habitantes; o los 57.493 de 1998; pasando por los 56.638 del año 2003, una tendencia a la baja que desde 2010 en adelante no superaba los 55.000 empadronados y que en el año 2022 elevo la voz de alarma con tan solo 51.142, lo más cerca que ha estado la ciudad de bajar esa cifra de 50.000 que supondría un grave perjuicio para los vecinos.
