28/06/2022.- Finales de 2023. Es la fecha que se baraja para concluir el ramal de continuidad Sierrapando-Barreda, con el desdoblamiento que une las autovías de La Meseta (A-67) y del Cantábrico (A-8), reordenando los accesos a Torrelavega por su parte Norte, pero también mejorando la movilidad en esa zona de Cantabria, con una inversión de 118 millones de euros.
Un tramo de unos dos kilómetros de gran singularidad, con 46 estructuras, 30 de nueva ejecución y 16 actuaciones de ampliación de las ya existentes, que este martes se recorría en una visita guiada por los ingenieros del proyecto.
Los trabajos están ejecutados por encima del 55 % y los retrasos que se acumulan se deben, en su mayor parte, a la complejidad y a modificados que ha sido necesario introducir para mejorar la seguridad en algunas estructuras, y también a la mala climatología de algunas temporadas.
No obstante, se trabaja con el horizonte de finales de 2023 para tener concluido este corredor que acerca la Meseta a Cantabria a través de la A-67, ya que hará fluir el elevado tráfico que tiene su origen o destino en Santander y que confluye en Torrelavega con el de la A-8. Esta tramo común, de unos dos kilómetros, ha sido el más problemático durante años, ya que es donde se producen problemas de congestión de tráfico, en especial durante los fines de semana y en la temporada estival, coincidiendo con el mayor volumen de desplazamientos por carretera.
