La oposición política de Torrelavega en bloque ha vuelto a denunciar la situación de cierre del matadero comarcal de Barreda, lo que advierten puede provocar un "grave problema de desabastecimiento de carne" en unas fechas con la Navidad a la vuelta de la esquina, teniendo en cuenta además que este matadero es el único de Cantabria que sacrifica porcino y ovino, cuando uno de los platos típicos de esas fechas es, precisamente, el lechazo.
PP, ACPT, Ciudadanos y Torrelavega sí han denunciado el acuerdo adoptado ayer por el equipo de Gobierno municipal (PRC-PSOE) para realizar otra media docena de obras de mejora de la seguridad en el matadero antes de reabrir la instalación, lo que aseguran "supondrá más semanas de retraso".
Dicho acuerdo establece la construcción de un nuevo muelle de descarga, la instalación de una manga de acceso a boxes mediante estructuras metálicas con barrotes horizontales para facilitar la conducción del animal y permitir el acceso al lazareto, la colocación de pasarelas por encima de las tapias de los boxes, alargar el box 9 con una nueva salida a la línea de sacrificio del porcino y mejorar el sistema de apertura de portillas de los boxes.
Unas obras acordadas con "total oscurantismo y falta de transparencia e información a los grupos de la oposición", han denunciado, a la vez que han asegurado que la necesidad de ejecutar estos trabajos demuestra que las obras de las últimas semanas "no han valido absolutamente para nada" y se ha "tirado" tiempo y dinero.
Por ello, solicitan que se "depuren responsabilidades" y reclaman la dimisión del socialista José Luis Urraca, como concejal responsable de esta instalación, al que considera un "auténtico incompetente".
Declaraciones realizadas en rueda de prensa en el salón de plenos del Ayuntamiento, donde se vivieron unos minutos de tensión al tratar de impedirles el uso de dicha sala la jefa de prensa y el jefe de gabinete de Alcaldía, por no haberlo solicitado previamente.
Recordar que el matadero de Torrelavega dejó de recepcionar animales el pasado 20 de octubre, en principio durante una semana, para acometer unas obras "provisionales" para adecuarse a lo que exigía la Inspección de Trabajo que había ordenado la paralización de la actividad hasta que se realizaran los trabajos para acabar con el "riesgo" que, a su juicio, existía para los empleados las actuales condiciones de acceso del ganado. Los plazos para la reapertura se han ido prolongando y a día de hoy el matadero está cerrado.
A día de hoy, la oposición asegura que "no queda un gramo de carne en el matadero de Barreda", a la vez que han advertido de la precaria situación en la que se encontrarían los otros dos mataderos de Cantabria: el de Guarnizo 'a medio gas' tras detectarse algún caso de Covid, y el de Reinosa con tan solo 6 matarifes.
Además, han denunciado las pérdidas económicas que está suponiendo, especialmente para los ganaderos y para los carniceros. En este sentido, pese a felicitarse de que, aunque con "retraso", las obras se vayan a ejecutar, la oposición ha advertido que estas nuevas actuaciones pueden suponer que el matadero permanezca más tiempo cerrado, incluso durante "mucho tiempo", con las pérdidas económicas que ello supone, la "pérdida de confianza" por parte de los usuarios de la instalación y el perjuicio para los trabajadores.
Además se han quejado de que el alcalde de Torrelavega, el regionalista Javier López Estrada, "no responde" a las preguntas de la oposición sobre este tema y ha retrasado hasta el lunes, 9 de noviembre, la celebración de la Junta de Portavoces a la que se había comprometido. "No vamos a permitir que se nos oculte información, se nos engañe a nosotros y a la gente que pueda verse afectada", han advertido.