El Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, destinará un total de 3.156.585 euros, con cargo a los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) procedentes de la iniciativa Next Generation de la Unión Europea, a la financiación de actuaciones de restauración y recuperación ambiental en el municipio de Suances y la antigua cantera de Cuchía en Miengo, así como para la mejora de la biodiversidad de la Marisma Blanca de El Astillero.
Así lo ha anunciado hoy el consejero, Guillermo Blanco en su visita a las canteras de Cuchía, donde ha estado acompañado del director general de Boodiversidad, Antonio Lucio, los alcaldes de Miengo, Suances y Astillero, José Manuel Cabrero, Andrés Ruiz Moya yJavier Fernández Soberón respectivamente, así como por el presidente de la junta vecinal de Cuchía, representantes de la empresa Solvay y miembros de Seo BirdLife.
En el caso de Miengo, las actuaciones suponen una inversión de 2.326.065 euros y tiene el objetivo de restaurar medioambientalmente espacios postindustriales; mejorar e incrementar la capacidad de acogida para la flora y la fauna silvestre alóctona, aprovechando las particularidades de la zona, y acercar estos espacios naturales a la población para su uso recreativo y el fomento de la participación ciudadana.
Así, se llevará a cabo el aumento y la mejora de las zonas húmedas mediante el desbroce de una superficie de 74.600 metros cuadrados de especies invasoras y la excavación de 31.470 metros cúbicos de tierra, además de la restauración ambiental del encinar cantábrico sobre una zona de más de 31 hectáreas, eliminando las correspondientes plantas invasoras y plantando especies autóctonas.
También se habilitarán zonas de pastoreo para favorecer el mantenimiento de las zonas de pasto y su restauración, así como el mantenimiento del paisaje tradicional ganadero sobre una zona de más de 28 hectáreas; la actuación en taludes y zonas inaccesibles, mediante la eliminación de plantas invasoras y una hidrosiembra con especies autóctonas sobre una superficie de taludes de casi 7 hectáreas.
Las actuaciones de restauración ambiental se completarán con la restauración de un pequeño bosque de ribera; la formación de taludes terrosos para facilitar la anidación de fauna silvestre; la mejora de pistas y sendas; la construcción de 4 miradores; un observatorio de aves, y la colocación de carteles y señales direccionales.
Por su parte, en Suances se invertirá un total de 436.656 euros para llevar a cabo la restauración y recuperación ambiental de El Monte de Suances, con el fin de convertir una zona degradada en un espacio para que los ciudadanos y la fauna existente puedan disfrutar de un medio ambiente de calidad, así como unir la parta alta y con la parte baja de Suances a través de una red de caminos y senderos agradables para el paseo.
Así, se eliminarán ejemplares de plumeros, tanto de manera mecánica, en una superficie de 67.396 metros cuadrados, como de manera manual, en una superficie de 12.280 metros cuadrados, según la tipología del terreno.
También se llevará a cabo la restauración forestal de la zona, mediante la plantación de encinas y otras especies propias de su cohorte, tales como el laurel, el labiérnago, el aladierno, el madroño, el espino albar y el avellano, entre otros.
Las actuaciones se completarán con la mejora de pistas y senderos interiores, incluyendo la colocación de 4 mesas interpretativas y 12 paneles indicativos.
Fomento de los espacios verdes
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha destacado la importancia de impulsar este tipo de proyectos medioambientales con el fin de promover la integración de los espacios abandonados y degradados en los sistemas de infraestructuras verdes de los ayuntamientos de la región.
En el caso de Miengo, el objetivo del proyecto es completar la “restauración ejemplar” realizada por Solvay y que, en la última fase, hasta ahora, ha contado con la colaboración de SEO-BirdLife y consolidar un área de alto valor ecológico que mejore la conectividad ambiental en la zona de la ría y también favorezca el uso público y el conocimiento y respeto al patrimonio natural y la historia del aprovechamiento de los recursos naturales de esa zona de la desembocadura del Saja-Besaya.
Las actuaciones contempladas en Suances pretenden, tal y como ha explicado, “frenar y revertir los procesos de degradación ecológica y ambiental de la zona mediante un plan de restauración ambiental que se integra en otras políticas socioeconómicas que permitan incorporar estrategias de sostenibilidad”.
Finalmente, ha reafirmado el compromiso de su departamento de seguir potenciando en la región las actuaciones de restauración ambiental, infraestructura verde y conectividad ecológica, con actuaciones encaminadas a proporcionar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles, en particular, para los niños, las personas de edad y las personas con discapacidad. “Con estas actuaciones buscamos mantener, fortalecer y, donde sea posible, restaurar la biodiversidad, así como mejorando el vínculo social y cultural de los ciudadanos con la naturaleza”, ha concluido Blanco.