Tanto la Fiscalía como la representación de la viuda del tendero chico, que ejerce la acusación particular, piden 25 años de prisión para cada uno de los acusados, 20 por asesinato y cinco por robo con violencia en local abierto al público.
Según se prevé en la diligencia de ordenación, el juicio arrancará el 23 con la declaración de los tres acusados y de la mujer del tendero chico, que comparecerá como testigo acompañada de un traductor.
Al día siguiente, declararán los otros nueve testigos y el día 25 será el turno de los cinco peritos y de las conclusiones de las partes, aunque existe la posibilidad de que el 26 también se celebre vista si no se hubiera podido concluir el día anterior. Además de las penas de cárcel, el Ministerio Público y la acusación particular piden también para cada uno de ellos 20 años de libertad vigilada e indemnizaciones conjuntas por importe de 126.538 euros para la esposa del fallecido; 52.724 euros para cada uno de sus dos hijos menores; y 10.544 euros para cada uno de sus progenitores.
Mientras los tres acusados, dos chicos y una chica, que tenían en el momento de los hechos 24, 20 y 21 años, niegan los hechos y piden la libre absolución.
El de 24 años, imputado también por un delito leve de lesiones por dar una patada a la mujer del comerciante, permanece en prisión provisional desde noviembre de 2015, mientras que los otros dos jóvenes salieron en libertad bajo fianza en abril del año pasado.
En su escrito de acusación la fiscal de la sección de Torrelavega señala que "con total menosprecio a la vida del comerciante", los tres procesados le propinaron una "brutal paliza", con golpes y patadas en la cabeza y el resto del cuerpo.
La víctima, de 35 años, fue operada de urgencia en el Hospital Valdecilla, falleciendo días más tarde como consecuencia de las lesiones sufridas. Según detalla el fiscal, la causa básica de la muerte fue traumatismo cráneo-encefálico grave; la causa intermedia, neumonía; y la causa inmediata, fracaso multiorgánico.
Uno de los acusados que salió en libertad provisional el año pasado, sostiene que no intervino en ninguna paliza ni agresión al fallecido, que no golpeó de ninguna forma a su mujer, que en ningún momento sustrajo ningún tipo de bien, alimento o bebidas de ningún supermercado "ni cercano ni lejano", y tampoco intervino en la sustracción de bebidas alcohólicas en la tienda del fallecido.
Asegura que lo único que hizo fue entrar a la tienda cuando ya se había producido la agresión por parte de uno de los acusados, para "intentar separar al agresor de la víctima".
Por otro lado, plantea la posibilidad de que la causa de la muerte no sea la agresión sino que sea producto de una patología diferente del hecho desencadenante, con lo que sostiene que los hechos pudieran no ser constitutivos de delito de asesinato, sino de otra calificación penal diferente.
En ese sentido, discrepa de que la causa básica de la muerte haya sido la agresión, al considerar que el traumatismo craneoencefálico que reflejan los informes forenses "nada tiene que ver con la causa definitiva de la muerte que fue una neumonía que dio lugar a un fracaso multiorgánico".
La joven que salió en libertad provisional casi a la par que el anterior, también asegura en su escrito de defensa que ni golpea al fallecido ni a su esposa y que no roba efecto alguno de su comercio.
Mientras que el imputado que permanece en prisión se limita a negar el correlato del Ministerio Fiscal y la acusación particular.
Contra la resolución, cabe interponer recurso de reposición en el plazo de tres días siguientes a la notificación.