El Partido Popular de Torrelavega ha dado a conocer la 'letra pequeña' del proyecto para implantar la denominada tarjeta ciudadana en el municipio, que salió la pasada semana a licitación en 484.000 euros. El concejal popular Miguel Ángel Vargas asegura que tanto la partida destinada como los detalles del proyecto son "insuficientes", ya que por ejemplo establece una disponibilidad de 15.000 tarjetas, cuando Torrelavega tiene 52.000 empadronados. Es por ello que Vargas insta el equipo de Gobierno a "darle una vuelta al proyecto", que califica de "capricho del PRC".
Vargas ha explicado que a los 484.000 euros del coste de este proyecto habrá que sumar nuevos importes, dado que los suministros que se prevén son insuficientes, a la vez que considera "excesivo" el gasto en un "proyecto inacabado" y que asegura genera dudas sobre su impacto en el aumento de empadronamientos.
Desde el grupo popular sospechan que la tarjeta ciudadana es una herramienta pensada para "amortiguar el golpe de aquellos ciudadanos contrarios a la OLA cuando el equipo de gobierno regionalista y socialista la apruebe", y rechazan el planteamiento inicial por ser "demasiado genérico" y no concretar aspectos sobre la realidad de los torrelaveguenses, sino que se basa en "futuribles", dijo Miguel Ángel Vargas.
El concejal ha subrayado que su grupo no rechaza la apuesta por las nuevas tecnologías y por una relación entre el Ayuntamiento y el ciudadano más electrónica y que sirva para facilitar al vecino todas las gestiones municipales, pero consideran que el proyecto gestado por el equipo de gobierno dista mucho de la idea. Así, ha criticado una vez más la falta de diálogo de un equipo de gobierno PRC-PSOE que "impone ideas y proyectos cerrados sin dar margen a la participación de los demás grupos".
“En Torrelavega no necesitamos gastar medio millón de euros en un dispositivo para identificarnos ante el Ayuntamiento o para pagar recibos, necesitamos otro revulsivo y no es otro que el que viene de la mano de inversiones, empleo, oferta de suelo industrial y vivienda para los jóvenes que se van de la ciudad. Aunque para ello hay que tener un proyecto de ciudad y una actitud reivindicativa en Santander y en Madrid de la que el equipo de gobierno carece”, concluyó.