El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha realizado una visita a las instalaciones del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) para comprobar la labor “indispensable” que desarrolla este organismo autónomo en beneficio del cuidado de la calidad ambiental de Cantabria.
Asimismo, ha puesto en valor la importante actividad de servicio de laboratorio de calidad que realiza cada año como laboratorio de ensayo en el sector medioambiental acreditado por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC).
De igual forma, ha destacado la labor de análisis de la calidad de las aguas y de la atmósfera que lleva a cabo, así como el papel que desempeña la Red de Control y Vigilancia de la Calidad del Aire de Cantabria, un servicio que el año que viene contará con una mayor partida presupuestaria para mejorar sus prestaciones y servicios en beneficio de la calidad del aire en Cantabria y su seguimiento.
El titular de Medio Ambiente ha defendido la labor del CIMA a la hora de promover la sostenibilidad y el cuidado y la mejora del medio ambiente en Cantabria, y ha reafirmado el compromiso de su departamento de garantizar la mejora continua de la calidad ambiental en la Comunidad Autónoma.
En este sentido, ha calificado de acertada la decisión del Gobierno de unificar en esta legislatura en una misma consejería las políticas medioambientales y del sector primario. “Ahora hay mayor coordinación en Cantabria”, ha insistido.
Laboratorio del CIMA
Durante su visita al CIMA, el consejero ha comprobado el funcionamiento del servicio de laboratorio de calidad, que en lo que va de año ha tramitado cerca de 2.500 muestras y ha funcionado como apoyo a los servicios esenciales durante la vigencia del estado de alarma.
Tal y como ha destacado el consejero, “son trabajos que se realizan en colaboración con otras entidades públicas y comprenden mediciones periódicas programadas y otras puntuales”.
Así, ha destacado los trabajos en colaboración con la empresa pública MARE, para la toma de muestras y análisis periódicos en vertederos y su entorno, además de en todas las estaciones depuradoras de aguas residuales que gestiona para dar cumplimiento a los controles periódicos que marca la normativa, analizando en torno a 800 muestras al año.
También se ha referido a los trabajos, en colaboración con la Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente, y Cambio Climático, para el análisis de las muestras tomadas por su personal técnico dentro de las funciones de control establecidas para las instalaciones afectadas por la Ley 16/2002 de Prevención y Control Integrados de la Contaminación, analizando en torno a 150 muestras al año.
Igualmente, destacan las 500 muestras anuales para analizar vertidos a los colectores de saneamiento, toma de muestras y análisis de vertidos al medio receptor, análisis de muestras relativas al canon de saneamiento, y campaña de análisis dentro del Estudio ‘Red de Calidad de las Aguas Litorales de la Comunidad Autónoma de Cantabria’, en colaboración con la Dirección General de Obras Hidráulicas y Puertos.
De igual forma, ha realizado al menos 30 muestras y análisis al año de aguas potables de la red de distribución, según convenio de colaboración establecido entre el CIMA y el Ayuntamiento de Torrelavega; 200 muestras anuales de análisis de metales captados sobre filtros de microfibra de cuarzo del área de Calidad del Aire del CIMA; un centenar de muestras y análisis derivados del control de calidad del laboratorio, incluyendo ejercicios de intercomparación, y actividades y mediciones puntuales que comprenden trabajos para las entidades citadas, y para otras como la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, el Instituto de Hidráulica Ambiental (IH Cantabria), distintos ayuntamientos y asociaciones como RÍA o Centinelas, entre otros.