Crece el consumo de cannabis entre los más jóvenes, incluso en adolescentes, que además lo perciben como algo normal y sin riesgo. Es el dato más destacado, y más preocupante, de la memoria de actividad del año 2016 de la Asociación Montañesa de Ayuda al Toxicómano AMAT dada a conocer hoy en rueda de prensa por la concejal de Servicios Sociales, Patricia Portilla, junto a Alberto Marchante y Arantxa Castañón.
Un año en el que se atendió a 674 personas en los distintos programas de intervención, y se impartieron charlas y talleres de prevención por 16 centros escolares de toda la comarca a más de un millar de jóvenes. Durante la rueda de prensa, la responsable de Servicios Sociales, Patricia Portilla, se ha referido a AMAT como “una entidad fundamental” en Torrelavega por el trabajo que realiza, y ha destacado su coordinación “excelente” con los Servicios Sociales municipales. Como ejemplo de este trabajo coordinado ha destacado un dato, y es que el 28% de las personas atendidas en el programa ‘Información y Acogida’ fueron derivados por las Unidades de Servicios Sociales de Atención Primaria.
Respecto al trabajo realizado en 2016 por AMAT, Arantxa Castañón, ha llamado la atención sobre un dato “muy preocupante” relacionado con los jóvenes y el consumo del cannabis. Según ha informado, el 32% de casos atendidos dentro del programa ‘Apoyo a la integración social’ lo son por su consumo, la mayoría son jóvenes a partir de 13 años que “no lo perciben como un riesgo” y que lo ven como “una vía de escape, de diversión, de sentirse bien”. De ahí que desde AMAT, ha dicho Castañón, se quiera “alertar” sobre esta situación y se considere “necesario” desarrollar actividades “específicas” para este nuevo perfil. El repunte de este consumo es tal que en AMAT reciben casos, prácticamente cada semana.
En cuanto a los datos que recoge la Memoria, Alberto Marchante ha informado que dentro del programa ’Información y Acogida’ se han atendido a un total de 324 personas, de las cuales, el 28% que acude de los servicios sociales, un 27% lo hace por demanda familiar y un 18% por iniciativa propia. y en el programa ‘Asistencia a Familiares’ se atendieron, ha destacado, a 148 personas, la cifra “más elevada de los últimos años”.
Dentro del programa ‘Apoyo a la integración social’ al que se acude para realizar tratamiento, cambiar conductas y abandonar el consumo de sustancias, ha indicado, se atendieron el pasado año a 202 personas. La sustancia percibida como origen de la petición de ayuda continúa siendo la cocaína acompañada por el alcohol en un 53%; le sigue con un 32% el aumento de demandas relacionadas con el consumo de cannabis, en muchos casos en usuarios muy jóvenes (13,14 y 15 años); y las demandas por alcohol sin cocaína con un 12% y otras sustancias como heroína con un 2% y anfetaminas con un 1%. Y la situación socio-laboral al momento del ingreso del programa es en un 50% el desempleo, un 27% trabaja, un 18% está en formación y un 5% está en situación de cobro de prestaciones/ayudas sociales.