28/10/2021.- Cantabria da un paso más hacia la nueva normalidad, en este caso en las residencias y centros de atención. La ausencia de nuevos casos ha impulsado al Gobierno a suprimir y flexibilizar las restricciones.
Así, se va a permitir una mayor interacción social entre los usuarios, al suspenderse la división por grupos, y eliminarse las restricciones en las salidas. También, para los usuarios de centros de atención 24 horas, se elimina la obligación de llevar mascarilla cuando el nivel de vacunación supere el 80%, quedando limitado su uso a las personas trabajadoras, visitas y proveedores.
Según recoge la nueva resolución, las salidas de los residentes al exterior de los centros se realizarán en las mismas condiciones que la población general. El texto también aboga por continuar facilitando las visitas dentro de los centros, sin más restricciones que las derivadas de la disponibilidad de espacios y la demanda existente. No obstante, estas se efectuarán siempre con cita previa y durante las mismas se asegurarán las medidas preventivas generales.
Desde el Gobierno recuerdan que Cantabria ha sido una de las Comunidades Autónomas que menos impedimentos y restricciones ha impuesto a las visitas de familiares. Mientras que ha habido comunidades en las que las residencias han estado cerradas a visitas durante más de un año, en Cantabria esta limitación solo se adoptó al inicio de la crisis sanitaria, entre los meses de marzo y mayo del año pasado.
Por lo que afecta a los trabajadores, la norma determina que debe promoverse la vacunación del nuevo trabajador a la mayor brevedad posible de no estar vacunado, y en ese caso, estos tendrán que someterse a una prueba PDIA dos veces por semana.
Con relación al resto de medidas, se mantienen las que recogía la resolución de marzo de este año, referidas a trabajadores que tengan síntomas compatibles con covid, periodos de cuarentena, obligatoriedad de hacerse una PCR, y uso correcto del material de protección, mascarillas e higiene de manos.
Asimismo, la resolución permite que los estudiantes puedan realizar prácticas formativas regladas en los centros de servicios sociales siempre que no existan casos covid confirmados. Los alumnos en prácticas tendrán que cumplir las mismas exigencias aplicadas a los trabajadores.
Los centros de servicios sociales deberán seguir contando con un Plan de Contingencia dirigido a la prevención y a dar respuesta ante la eventual aparición de casos y brotes de COVID-19, así como un profesional que actuará como Coordinador. Los centros tienen que seguir manteniendo una capacidad de aislamiento individualizado para al menos el 10% de sus usuarios.
En caso de que Cantabria subiera a nivel de alerta 2 o superior, de nuevo volverían a aplicarse medidas más restrictivas tanto para usuarios como para trabajadores, estableciéndose grupos convivenciales para las diferentes actividades.
Centros de atención diurna
En los centros de día y como regla general, las personas usuarias deberán usar mascarillas siempre que no sea posible mantener la distancia de seguridad interpersonal. En los casos que estén contraindicadas se cuidará el mantenimiento de la distancia de seguridad entre los usuarios. Será igualmente obligatorio el uso permanente de la mascarilla por los trabajadores, visitantes y proveedores.
En los centros sociales de mayores tanto trabajadores como usuarios deberán seguir usando mascarilla. La resolución especifica que no existirá límite de aforo siempre que sea posible el mantenimiento de la distancia interpersonal y una ventilación adecuada.
Por lo que respecta a los centros de atención a la primera infancia, infancia y adolescencia, se aplicarán las disposiciones que establezca la Consejería de Educación y Formación Profesional para la asistencia y actividad en las etapas de edades similares en los centros educativos.
La resolución completa puede consultarse en: https://boc.cantabria.es/boces/verAnuncioAction.do?idAnuBlob=366530