La empresa química Moehs Cántabra, ubicada en el polígono industrial de Requejada (Polanco), adoptará medidas "con carácter inmediato" para dar respuesta a las quejas vecinales por malos olores en la zona de viviendas más próxima a la factoría y también en pueblo de Mar.
Según ha informado el Ayuntamiento de Polanco, estas medidas responden a una petición cursada por la alcaldesa, Rosa Díaz, y consistirán en usar productos inhibidores para eliminar malos olores en el "corto espacio de tiempo" en que la planta va a seguir fabricando el producto causante del problema, hasta mediados de septiembre.
Tras entrevistarse con el director de la planta, Díaz ha señalado que el producto "no es tóxico ni entraña riesgo para la salud de los vecinos", pese a que sí sea "algo molesto" por el fuerte olor que genera. Así, en los últimos días la empresa ha estado probando con varios productos inhibidores del olor que no resultaron eficaces, aunque ahora ha encontrado "el más adecuado" para el fin buscado. Además, el director de la planta ha confirmado a la alcaldesa que en agosto se hará una parada técnica de la producción, que se retomará a finales de mes.
La alcaldesa ha apuntado que la empresa ha pedido disculpas, a través del Consistorio, a los vecinos por las molestias causadas, y espera que con las medidas ya adoptadas se note una mejoría, aunque remitirá al Consistorio los correspondientes informes para certificar que la producción está dentro de la normalidad.
