La Policía ha iniciado los trámites para extraditar a España a Guillermo Fernández Bueno, el asesino y violador que se fugó de El Dueso (Santoña) hace una semana, aprovechando un permiso penitenciario, y que fue detenido ayer en Senegal junto a su novia, una educadora social vecina de Torrelavega que trabajó como voluntaria y a la que conoció hace años en la antigua prisión provincial de Santander, y que podría ser acusada como colaboradora.
Se puso así punto final a un fuga de 4.400 kilómetros, que le llevó a cruzar toda España y entrar en África por el puerto de Algeciras a Tánger en furgoneta.
Fuentes policiales han informado de que el preso, en orden de busca y captura internacional desde la semana pasada, fue detenido por agentes de la Policía Nacional en colaboración con las fuerzas de seguridad senegalesas. En esta detención fue clave la compañía de su pareja, que viajaba con su pasaporte auténtico y a la que se la seguía la pista desde hace días.
Aunque las características físicas del detenido coincidían con las de Fernández Bueno, un santanderino de 41 años, llevaba un pasaporte falso de modo que la confirmación oficial no se ha producido hasta que han cotejado sus huellas.
Recordar que Guillermo Fernández Bueno desapareció el pasado domingo 22 de julio, cuando debía volver a prisión tras disfrutar de un permiso penitenciario de siete días. El huido cumplía una condena desde 2001 de 26 años y medio de cárcel por violar y asesinar en una cafetería de Vitoria a una empleada de la limpieza el 14 de diciembre del año 2000. Además, tenía otra condena previa de 9 años de cárcel por otra agresión sexual cometida un mes antes.
El preso ya había cumplido 17 años y medio de cárcel y acababa su condena en 2026. Desde el año 2012 disfrutaba de permisos penitenciarios, pero tanto Instituciones Penitenciarias como el juez de Vigilancia Penitenciaria habían rechazado su pretensión de obtener el tercer grado.