El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y la vicepresidenta y consejera de Universidades e Investigación, Medio Ambiente y Política Social, Eva Díaz Tezanos, han realizado una visita esta mañana a las instalaciones del Centro de Atención a la Dependencia tras su compromiso en las últimas semanas con el comité de empresa.
Revilla ha asegurado que "mientras esté este Gobierno no se va a privatizar nada y menos una cosa tan sensible y delicada como es la atención a las personas dependientes", mientras que Diaz Tezanos ha afirmado que el objetivo del Gobierno de Cantabria es "hacer que el CAD de Sierrallana sea un referente en la Comunidad Autónoma y fuera de ella".
Para ello, han añadido, resulta "imprescindible" acometer una obra de reforma estructural en uno de los módulos, proyecto se está elaborando en estos momentos y que implicará el traslado temporal de 24 usuarios porque así lo dictaminan los técnicos y para garantizar, por encima de todo, la seguridad de estas personas, si bien se han comprometido a seguir estudiando las posibilidades que desde el centro y los representantes de los trabajadores y las familias se planteen.
El jefe del Ejecutivo ha hecho hincapié en la "preocupación" del Gobierno de Cantabria por la atención a las personas con discapacidad y la "especial sensibilidad" en la distribución de los recursos públicos para responder a sus necesidades.
Además, ha apuntado que tanto el Gobierno como los trabajadores del CAD coinciden en la necesidad de remodelar unas instalaciones que datan de 1996 y cuya ejecución es "coherente" con el discurso del Gobierno de apoyar a las personas con más necesidades.
Por su parte, Eva Díaz Tezanos ha rechazado las acusaciones de los sindicatos sobre una supuesta privatización futura del centro y ha explicado que las obras se abordan para "dignificar lo público" y "adaptar unas instalaciones totalmente obsoletas al modelo centrado en la atención a la persona". Además, se ha mostrado abierta a dialogar y analizar las propuestas de los trabajadores, "pero siempre primando la calidad y la seguridad de los usuarios".
"No solo no tenemos intención de privatizar lo público sino que hemos dado muestra de todo lo contrario, de apostar y dignificar lo público", ha declarado la vicepresidenta.
Díaz Tezanos ha explicado que, tras la detección de terminas a finales del pasado año, se ha decidido aprovechar la situación para acometer la reforma integral del módulo afectado, que estaba pendiente de realizar. En este sentido, ha insistido en que la decisión del Ejecutivo de trasladar "de manera temporal" a los usuarios durante la obra se basa en informes técnicos y responde únicamente al objetivo de garantizar la atención adecuada y la seguridad de los usuarios del centro.
"La administración no va a correr ningún riesgo", ha asegurado Díaz Tezanos, que, no obstante, ha explicado que el ICASS va a analizar las propuestas y sugerencias que los trabajadores les han trasladado. "Estamos abiertos, como siempre, a escuchar, a dialogar, a poder consensuar lo mejor, pero primando siempre la seguridad de los usuarios del CAD", ha afirmado.
Sobre los trabajadores, Díaz Tezanos ha asegurado que seguirán en el centro reforzando los otros dos módulos que van a recibir residentes del módulo en obras y, además, recibiendo formación necesaria para la puesta en marcha del modelo de atención centrado en la persona por el que apuesta el Gobierno de Cantabria en materia de dependencia y discapacidad.
"Queremos aprovechar para potenciar el modelo de atención centrada a la persona que estamos implantado en la Comunidad Autónoma para la atención a personas dependientes y con discapacidad. Un modelo que requiere también un cambio de mentalidad y requiere mucha formación continua, que estos años ha estado prácticamente paralizada. Y es el momento oportuno para llevar a cabo todo este proceso", ha dicho la vicepresidenta.
El CAD de Sierrallana es el único centro público en la Comunidad Autónoma que ofrece una atención integral y especializada a las personas con discapacidad intelectual en situación de dependencia severa.
El centro, que se distribuye en tres módulos, cuenta con 110 plazas públicas de estancia permanente, 10 para estancias temporales y otras 10 para atención de día. Actualmente cuenta con 97 usuarios y 160 trabajadores.
