El Ayuntamiento de Reocín ha trasladado su apoyo a los trabajadores de la planta de Bridgestone en Puente San Miguel tras anunciar la multinacional su intención de despedir a 211, la mitad de la plantilla.
Ante esto, el Consistorio pide explorar "alternativas" a esa medida y llama al Gobierno de Cantabria -en concreto a su presidenta, María José Sáenz de Buruaga, y al consejero de Industria, Eduardo Arasti- a "ir de la mano" del Ejecutivo vasco para reclamar a la dirección de la compañía una solución.
El alcalde de Reocín, Pablo Diestro, y representantes de la Corporación municipal, se han reunido este viernes con el comité de empresa de Bridgestone para mostrar el apoyo a la plantilla.
"Les hemos dicho que estamos a plena disposición para ellos para lo que puedan necesitar", ha explicado el regidor, que ha confirmado al órgano de representación sindical que participarán en la manifestación convocada este martes, 8 de abril, coincidiendo con el primer día de huelga. Saldrá a las 18.00 horas de la fábrica hacia Torrelavega bajo el lema 'En Bridgestone no sobra nadie, faltan soluciones'.
Y han llamado a la participación: "Cuantos más vecinos se animen a apoyar a estos trabajadores, mejor", ha recalcado Diestro en un comunicado.
También ha instado "a las altas instancias" a buscar alternativas a los despidos. Así, han solicitado a Buruaga y a Arasti que el Ejecutivo cántabro se una al vasco, que ha anunciado su intención de acudir a Bruselas para pedir "soluciones" a la dirección de la empresa.
"Animamos a nuestra presidenta y al consejero a ir de la mano con el Gobierno vasco a reclamar en Bruselas una posible solución al despido de 211 personas, que son 211 familias", ha expresado Diestro.
Según ha advertido, estos despidos afectarían "de una forma muy fuerte a toda la comarca" e incluso "a toda la comunidad". En este sentido, ha indicado que estudios de la Universidad de Cantabria apuntan que por cada despido directo en una factoría como Bridgestone podría haber "tres indirectos", de talleres y pequeñas empresas vinculadas a la fábrica y del pequeño comercio y el sector servicios, por el consumo que dejan de hacer las familias afectadas.
El presidente del comité de empresa, Luis Ruiz Eguren, ha agradecido al Ayuntamiento "que hayan atendido la llamada tan rápido y con tanta predisposición".
"Sabemos las limitaciones que tiene un alcalde para poder hacer algo, pero nos ha puesto todos sus medios para ayudarnos en todo lo que pueda" y "lo agradecemos mucho porque no nos vemos solos", ha afirmado.
Esperan que la empresa recapacite y mejore las condiciones o reduzca "el mayor impacto posible" de las medidas previstas en la planta de Puente San Miguel.