Dos de los municipios costeros de la comarca del Besaya como son Piélagos y Suances le han declarado la guerra al botellón y a las acampadas ilegales, dos prácticas prohibidas pero que en este verano marcado por el coronavirus han proliferado de forma importante. Ello ha obligado a estos ayuntamientos a reforzar la vigilancia y control.
Así, en Piélagos, la Policía Local ha formulado, a lo largo de las últimas dos semanas, un total de 50 denuncias por consumo de alcohol en la vía pública y otras 35 por acampar y pernoctar en el Parque Natural de las Dunas de Liencres.
La alcaldesa del municipio, Verónica Samperio, ha destacado la actividad llevada a cabo por los agentes adscritos a este servicio en un verano en el que, según ha dicho, prácticas como el conocido ‘botellón’ resultan especialmente peligrosas debido a la Alerta sanitaria provocada por el COVID-19.
Samperio también se ha referido a otro fenómeno, la acampada ilegal, que si bien no es nuevo ni exclusivo del municipio se está incrementando en los últimos meses con las consecuencias que ello conlleva tanto para los vecinos y vecinas del municipio, como para esas personas que eligen Piélagos como destino vacacional.
La regidora municipal ha explicado que el consumo de alcohol en la vía pública, principalmente por jóvenes, no sólo genera conductas incívicas, como peleas, suciedad o problemas de ruidos sino que, además, constituye un problema de salud pública, ya que, en muchos casos, se concentran muchas personas en un espacio reducido y lo hacen sin usar la mascarilla, a pesar de su obligatoriedad.
En cuanto a la acampada libre y las pernoctaciones en el Parque Natural de las Dunas de Liencres, espacio que es gestionado por un Patronato integrado por distintas administraciones, una de ellas el Consistorio, ha incidido en que la Policía Local ha venido desarrollando una actividad disuasoria sobre una práctica prohibida en este espacio y, por tanto, ilegal.
En este sentido, ha advertido de que, a la vista de la reticencia de los visitantes a no estacionar y pasar la noche en este entorno protegido, la Policía Local ha comenzado a cursar denuncias, habiéndose tramitado 35 durante las dos últimas semanas.
Por su parte, la Policía Local de Suances ha interpuesto durante el pasado mes de julio un total de 333 sanciones. Actuaciones que se enmarcan dentro del plan especial puesto en marcha durante el verano para incrementar la vigilancia y seguridad en las zonas de mayor afluencia turística. Según han detallado el Ayuntamiento suancino, de estas sanciones 171 son denuncias por consumo de alcohol en la vía pública y 18 relativas a la Ley de Seguridad Ciudadana.
Cabe recordar que el Ayuntamiento está haciendo un importante esfuerzo para erradicar la práctica del botellón en el municipio. En esta línea, recientemente se ha aprobado un nuevo reglamento municipal para prohibir este tipo de reuniones y se está llevando a cabo un plan de control especial para tratar de evitar estas concentraciones.
El cuanto al uso obligatorio de la mascarilla, la Policía Local ha interpuesto un total de 60 sanciones por no cumplir esta normativa. Además, se está haciendo una importante labor pedagógica e informativa para concienciar a la población en general de la importancia del uso obligatorio de la mascarilla en espacios públicos (ya sea al aire libre o zonas cerradas).
En cuanto al resto de sanciones interpuestas (84) están relacionadas con diferentes ordenanzas municipales (como ruidos, tenencia y cuidado de perros, aparcamiento de vehículos,…).
