TORRELAVEGA SÌ ABOGA POR ELIMINAR EL CARRIL BICI A TORRES
Esta formación cree que los cambios introducidos en los viales urbanos para facilitar su uso compartido por vehículos y bicicletas pueden servir para "finiquitar" el carril de Julio Hauzeur y Posada Herrera
El grupo municipal de Torrelavega Sí en el Ayuntamiento afirma que la revisión y los cambios de las normas de movilidad implantadas en estas últimas semanas, con los viales compartidos por vehículos y bicicletas, pueden servir para que éste sea el momento de "finiquitar" el carril bici hacia Torres, que a su juicio es un "punto negro" en la circulación local.
La portavoz de esta formación, Blanca Rosa Gómez Morante, se ha interesado en la última comisión de Movilidad y Urbanismo por saber cuánto tiempo más se extenderán en las medidas y cambios que afectan a la movilidad y circulación dentro del municipio y que fueron adoptados para fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte en los desplazamientos urbanos cotidianos. Un proyecto financiado con fondos europeos Feder que han coincidido con el Estado de Alarma.
En concreto, Torrelavega Sí ha preguntado si tendrán carácter permanente o se suprimirán cuando se recupere la normalidad algunas medidas implantadas, como el sentido único de tránsito para peatones en algunas aceras de la ciudad, como las del Bulevar Ronda, o la señalización en la calzada de los viales reservados para bicicletas.
Esta medida que hace referencia a la circulación de las bicicletas dentro del municipio es "especialmente importante" para Gómez Morante, que considera que si han quedado modificados definitivamente los viales de tránsito para ciclos y patinetes, el carril bici "ya no tendría sentido y resultaría urgente hacerlo desaparecer" a su paso por la avenida de Julio Hauzeur y calle de José Posada Herrera, "donde resulta especialmente nocivo".
Ya desde la pasada legislatura Torrelavega Sí viene reclamando medidas "drásticas" en relación al carril bici a su paso por los referidos viales, ya que sostiene que "la experiencia ha demostrado que resulta peligroso para los usuarios, un estorbo para los vecinos, una traba para los accesos a las urbanizaciones y aparcamientos sitos en sus márgenes y una rémora para el tráfico de una de las vías de acceso más importantes de la ciudad".