17 MILLONES Y 40 EMPLEOS PARA SONDEAR LA MINA EN 2018
La principal adjudicataria para explorar la antigua mina de zinc prevé invertir 600 millones y crera 1.500/2.000 empleos durante la explotación
El proyecto de explotación minera en la Comarca del Besaya de la empresa canadiense Emerita Resources, a través de su filial Cantábrica del Zinc, S.L., supondrá una inversión del orden de 600 millones de euros y la creación de entre 1.500 y 2.000 puestos de trabajo en la fase de construcción de la mina, cifra que posiblemente se incrementará en la fase de explotación. A corto plazo, la empresa invertirá 17 millones de euros y contratará a 40 personas para acometer el proyecto de investigación, que llevará a cabo en 2018.
Así se lo han asegurado hoy los representantes de esta firma, adjudicataria de una parte de la explotación de zinc en la Comarca del Besaya, al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y a la vicepresidenta, Eva Díaz Tezanos, en el transcurso de un encuentro en la sede del Gobierno regional en el que también han participado el consejero de Industria, Francisco Martín; los alcaldes de los municipios afectados (Reocín, Alfoz de Lloredo, Cabezón de la Sal, Cartes, Comillas, Mazcuerras, Miengo, Ruiloba, Santillana del Mar, Suances, Torrelavega y Udías), así como representantes de la CEOE, los sindicatos UGT y CC.OO, y de la Escuela de Minas.
Por parte de Emerita Resources, se han desplazado a Cantabria para presentar el plan de actuación el presidente del directorio, David P. Gower; el consejero delegado, Michael S. Timmins, y el representante del grupo empresarial en España, Joaquín Merino.
Revilla ha asegurado que este proyecto marcará “un antes y un después” en una zona especialmente “deprimida” por la crisis económica como es la Comarca del Besaya y ha garantizado que el Gobierno regional velará “al cien por cien” por que se cumpla toda la normativa medioambiental vigente. “Jamás vamos a permitir, por mucho trabajo que se genere y mineral que se saque, que se pueda hacer algo que pueda suponer un mínimo riesgo”, ha enfatizado.
En este sentido, ha señalado la intención de la empresa de hacer una “mina verde del siglo XXI, sin impacto visual y con una afección mínima” al entorno. Asimismo, ha confiado en que el estudio que en los próximos meses va a iniciar la compañía canadiense confirme la información recabada en su momento por la Escuela de Minas de Torrelavega en relación con los yacimientos existentes en el subsuelo aledaño a la mina de Reocín, que apunta a una concentración de zinc de al menos 20 millones de toneladas y de calidad superior, con un 11% de ley.
Finalmente, Revilla ha agradecido a los representantes de Emerita Resources su apuesta por Cantabria y ha puesto en valor que este proyecto cuenta con el apoyo del conjunto de la sociedad de Cantabria, hoy representada por el Gobierno, los ayuntamientos y los agentes económicos y sociales.
Por su parte, David P. Gower ha destacado las “oportunidades” y los “retos” que este proyecto ofrece a la empresa y ha agradecido la confianza depositada por del Gobierno de Cantabria, que, según ha dicho, “facilita la decisión de invertir y arriesgar”. Además, ha insistido en el compromiso de Emerita Resources con el medio ambiente y la seguridad de las personas, empresa que ha registrado en Canadá un balance de 40 millones de horas/trabajador sin accidentes laborales.
El representante de la marca en España, Joaquín Merino, ha explicado que la previsión es disponer en tres meses de los permisos necesarios para poder llevar a cabo la investigación a lo largo de 2018, una investigación que les permitirá delinear el cuerpo mineral existente y que determinará tanto los plazos para la construcción de la mina como para la posterior explotación de la misma.
Merino ha apuntado que los ritmos de producción en estos casos son de 1 millón de toneladas al año, con lo que, de certificarse la existencia de 20 millones de toneladas en el subsuelo cántabro, la actividad se extendería al menos durante dos décadas. Por último, al margen del volumen de empleo, ha resaltado el valor añadido que supone este proyecto para Cantabria, puesto que se llevará a cabo con recursos humanos y técnicos propios de la Comunidad Autónoma.
La comarca del Besaya, gran reserva mineral
El proyecto de extracción de zinc en la Comarca del Besaya es una de las grandes apuestas industriales del Gobierno de Cantabria para generar actividad y empleo, al menos, en las dos próximas décadas. La información que obra en manos de la Consejería de Industria revela que en el subsuelo próximo a la antigua Mina de Reocín se concentran más de 20 millones de toneladas de mineral, cuya explotación, según los cálculos realizados, podría generar más de 2.000 puestos de trabajo y una inversión multimillonaria en un entorno industrial, el del Besaya, depauperado en los últimos años.
El Ejecutivo regional publicó un concurso para conceder permisos de investigación sobre el terreno, concurso del que resultaron adjudicatarias seis empresas y que establecía un periodo de un año para que pudieran hacer sondeos sobre el terreno y presentar sus proyectos de negocio.
La empresa
Emerita Resources Corp. pertenece al grupo empresarial Forbes & Manhattan y se dedica a la adquisición y desarrollo de propiedades mineras en España y Brasil. Está focalizada en zinc, litio y oro. Los directivos de la compañía llevan décadas trabajando con las principales compañías mineras a nivel mundial, además, tienen una trayectoria exitosa que incluye numerosos descubrimientos de depósitos minerales, y desarrollos posteriores, de proyectos en América del Norte y del Sur, África y Australia.
Actualmente es titular de los proyectos mineros de investigación ‘Las Morras’ y ‘Peña Encina’, en Extremadura, y ‘Sierra Alta’, en Asturias.