Aspla firma la paz social hasta 2026 pero advierte del complejo contexto económico del plástico
Dirección y comité de Aspla han firmado esta semana el convenio colectivo, acordado el pasado mes de marzo tras una huelga histórica que paralizó la actividad durante 50 días. Un convenio suscrito por el Sindicato Unitario, CCOO y UGT (no por Sita-USO) que garantiza un crecimiento salarial del 13%, que podrá incrementarse en función de la evolución del IPC y de los resultados de la compañía. Un buen acuerdo, según ha destacado la empresa en un comunicado.
Aspla logra así la paz social hasta febrero de 2026, en un "contexto económico complejo", tal y como advierte la dirección que señala que "el negocio se está viendo afectado por circunstancias externas" como es la disminución de la demanda en múltiples sectores de la economía, la estigmatización del plástico y el impuesto sobre su uso, que están impulsando su eliminación o sustitución en determinadas aplicaciones, unido, señala en este mismo comunicado, a la falta de competitividad de los fabricantes europeos frente a terceros procedentes de otras regiones mundiales con condiciones que les hacen ser más eficientes. "Todo hace que el entorno en el que hoy se desenvuelve la Compañía sea muy complejo y augure presentes y futuras pérdidas de negocio", asegura.
Ante esta circunstancia, la dirección de Aspla explica que ya se ha acordado con la mayoría del Comité la reestructuración del periodo vacacional, y que actualmente se está negociando la modificación del sistema de turnos en varios departamentos de fábrica, no descartando la necesidad a futuro de introducir nuevas medidas que garanticen la viabilidad del negocio, paliando en la medida de lo posible las perjudiciales consecuencias que la prolongación del conflicto y el contexto general están generando a la Compañía.